Tito Nieves se prepara para Bellas Artes (Actualizado)
Fuente: Primera Hora, Puerto Rico. Por : Rosalina Marrero-Rodríguez
Tito Nieves no tiene dos pies izquierdos. Asegura que baila mejor de lo que canta. Para evidenciarlo, confiesa que conoció a su esposa, Irma Nieves, “bailando, bailando...”, como dice el éxito de Frankie Ruiz. “Así fue que conquisté a mi mujer, a mí me encanta el baile”, comenta mientras ensaya las coreografías para su debut este sábado en el Centro de Bellas Artes de San Juan.
Cuenta que, mientras realizaba una presentación en la ciudad de Los Ángeles, en California, sacó a bailar a Irma y desde entonces, no se han separado. Tienen 18 años de matrimonio.
“Yo bailo mejor de lo que canto”, sostiene para que no queden dudas sobre sus habilidades para sacudir su nueva figura.
El llamado “Pavarotti de la Salsa” se muestra entusiasta con los ensayos de las coreografías junto con el bailarín Jhesus Aponte, de la academia Rhythms, de Tito Ortos.
“Quiero dejar lo mejor de mí en ese escenario y después que yo logre esto, la otra sala que para mí es sumamente importante es el teatro Tapia”, comparte el salsero, quien cantará con el acompañamiento de unos 17 músicos.
Tratándose de su primer concierto en Bellas Artes, el artista quiere complacer al público con los éxitos románticos que han dado forma a sus más de tres décadas de carrera.
“Esperé tanto, que quiero darle todo de mí”, manifiesta.
Temas como Fabricando fantasía, No me queda más, El sonámbulo, La salsa vive y Le gusta que la vean, unidos a otros de sus tiempos en el Conjunto Clásico, serán parte del repertorio.
Ese proceso de seleccionar los temas, admite, no ha sido fácil, porque no acostumbra escuchar su música. Para lograrlo, se dejó llevar por las canciones que han sonado fuerte en la radio.
Terminado este compromiso, el cantante continuará la grabación de un disco inédito, con composiciones de su tío Miguel Ángel Amadeo, quien fue autor de muchos de los éxitos del legendario Héctor Lavoe.
Este disco saldrá al mercado en 2010.
Proyecta, además, rendirles tributo a los maestros Rafael Hernández y Pedro Flores.
Acá también presentamos la nota de El Nuevo Día, también de Puerto Rico
Fuente: El Nuevo Día, Puerto Rico. Por Ana Enid López
A Tito Nieves le molesta escuchar cosas negativas sobre Héctor Lavoe. Reconoce que no se puede esconder que la vida del “Cantante de los cantantes” fue tortuosa, pero él prefiere recordar a su amigo como el genio de la música que fue y como el artista del que más aprendió sobre el género de la salsa.
Fue en 1978 cuando Tito entró como corista a la orquesta de Héctor Lavoe. Y aunque ya llevaba varios años cantando con la Orquesta Cimarrón, estar en una tarima al lado del intérprete de ‘Mi gente’ encaminó definitivamente el rumbo del “Pavarotti de la salsa”, como lo bautizó el maestro Johnny Pacheco.
“Ese año grabé un disco con La Fania junto con el gran compositor Johnny Ortiz y se empezó a correr la voz de que había un nuevo cantante en la calle. Entonces Héctor (Lavoe) me llamó para ver si podía formar parte de su orquesta en sustitución de José Mangual. No lo podía creer, porque él era mi ídolo y de pronto iba a estar en el escenario con él. Para mí eso ha sido lo más impactante de mi carrera”, relató Tito Nieves, quien se toma muy personal todo lo que se dice públicamente sobre el “Rey de la puntualidad”.
“Héctor fue mi padrino, una influencia muy grande. Por eso me molestan las cosas negativas que sacan de él, porque pocos lo conocieron como ser humano. Por ejemplo, la película ‘El cantante’ creo que no tuvo mucho éxito porque los productores se enfocaron demasiado en el aspecto de las drogas. Pero esa vida oscura no puede opacar su éxito musical. Héctor no estaba arrebata’o las 24 horas y el público se enamoró de él como artista”, opinó Tito, quien también admiraba “la sencillez” de Lavoe.
En el 1979, Tito se integró al Conjunto Clásico, grupo con el que se mantuvo hasta 1986 y con el que produjo éxitos como ‘El piragüero’ y ‘El solitario’. Pero un año más tarde tocó fondo y se vio obligado a hacer una pausa en su carrera.
“Estaba en un momento bien difícil con la adicción al alcohol y las drogas. Tuve varias recaídas, como muchos de mis colegas, pero creo que eso era parte de mi destino. Yo me crié en una buena familia y fui monaguillo, así que nunca supe lo que era el vicio hasta que entré a la música. Veía a otros colegas y comencé a hacerlo como un vacilón, hasta que me hice adicto”, confesó.
“Ya llevo 19 años sin usar drogas”, añadió. “Me sometí a un tratamiento experimental y gracias a Dios conté con la ayuda de mi familia, porque sin eso uno no tiene nada”.
En el 1988 inició su carrera como solista apoyado por Ralph Mercado y su sello RMM.
“Mi primer éxito en esa etapa fue ‘Sonámbulo’ y de ahí seguí hasta el sol de hoy”, recordó el artista, quien se destacó por sus influencias de la música anglosajona.
“Como me crié en Nueva York crecí escuchando la música de Los Beatles, los Jackson’s Five, Donny Osmond y Frank Sinatra. Pero lo latino siempre se mantenía, porque la ciudad tenía la marca boricua”, explicó.
En efecto, uno de los mayores aciertos en la historia de Tito Nieves fue cantar salsa con letras en inglés. De su repertorio, el tema ‘I Like It Like That’ lo colocó en un nivel internacional.
“Cuando le llevé a Ralph Mercado la idea de hacer salsa en inglés no le gustó. Me dijo que eso había pasado de moda, pero me dejó grabar una, ‘I‘ll Always Love You’. El éxito fue tanto, que para el próximo disco me pidió que grabara dos y de ahí en adelante siempre incluíamos uno o dos temas en inglés en los discos”, explicó.
En años recientes, Tito señala su colaboración con el cantautor mexicano Marco Antonio Solís como otro de los momentos trascendentales en su trayectoria, en la que ha llevado su música a lugares tan distantes como África, Turquía y Japón.
Tito considera que en 35 años ha hecho una aportación importante al género, pero le emociona aún más saber que, tras sobrevivir duras pruebas de vida como perder un hijo y sobrevivir al cáncer, le queda mucho más por ofrecer. Con esa emoción cantará por primera vez en la Sala de Festivales del Centro de Bellas Artes Luis A. Ferré el próximo sábado, 24 de octubre, en dos funciones a las 8:00 y 11:00 p.m.
“Ese es un deseo que por fin se me va a dar y por eso estamos preparando un espectáculo diferente. Vamos a tratar de abarcar la mayor cantidad de temas posibles y hasta me van a ver bailando como nunca antes. Pero no voy a contar las sorpresas, porque los quiero impactar”, concluyó el artista, que espera lanzar un nuevo disco el año entrante.

Cuenta que, mientras realizaba una presentación en la ciudad de Los Ángeles, en California, sacó a bailar a Irma y desde entonces, no se han separado. Tienen 18 años de matrimonio.
“Yo bailo mejor de lo que canto”, sostiene para que no queden dudas sobre sus habilidades para sacudir su nueva figura.
El llamado “Pavarotti de la Salsa” se muestra entusiasta con los ensayos de las coreografías junto con el bailarín Jhesus Aponte, de la academia Rhythms, de Tito Ortos.
“Quiero dejar lo mejor de mí en ese escenario y después que yo logre esto, la otra sala que para mí es sumamente importante es el teatro Tapia”, comparte el salsero, quien cantará con el acompañamiento de unos 17 músicos.
Tratándose de su primer concierto en Bellas Artes, el artista quiere complacer al público con los éxitos románticos que han dado forma a sus más de tres décadas de carrera.
“Esperé tanto, que quiero darle todo de mí”, manifiesta.
Temas como Fabricando fantasía, No me queda más, El sonámbulo, La salsa vive y Le gusta que la vean, unidos a otros de sus tiempos en el Conjunto Clásico, serán parte del repertorio.
Ese proceso de seleccionar los temas, admite, no ha sido fácil, porque no acostumbra escuchar su música. Para lograrlo, se dejó llevar por las canciones que han sonado fuerte en la radio.
Terminado este compromiso, el cantante continuará la grabación de un disco inédito, con composiciones de su tío Miguel Ángel Amadeo, quien fue autor de muchos de los éxitos del legendario Héctor Lavoe.
Este disco saldrá al mercado en 2010.
Proyecta, además, rendirles tributo a los maestros Rafael Hernández y Pedro Flores.
Acá también presentamos la nota de El Nuevo Día, también de Puerto Rico
Fuente: El Nuevo Día, Puerto Rico. Por Ana Enid López
A Tito Nieves le molesta escuchar cosas negativas sobre Héctor Lavoe. Reconoce que no se puede esconder que la vida del “Cantante de los cantantes” fue tortuosa, pero él prefiere recordar a su amigo como el genio de la música que fue y como el artista del que más aprendió sobre el género de la salsa.
Fue en 1978 cuando Tito entró como corista a la orquesta de Héctor Lavoe. Y aunque ya llevaba varios años cantando con la Orquesta Cimarrón, estar en una tarima al lado del intérprete de ‘Mi gente’ encaminó definitivamente el rumbo del “Pavarotti de la salsa”, como lo bautizó el maestro Johnny Pacheco.
“Ese año grabé un disco con La Fania junto con el gran compositor Johnny Ortiz y se empezó a correr la voz de que había un nuevo cantante en la calle. Entonces Héctor (Lavoe) me llamó para ver si podía formar parte de su orquesta en sustitución de José Mangual. No lo podía creer, porque él era mi ídolo y de pronto iba a estar en el escenario con él. Para mí eso ha sido lo más impactante de mi carrera”, relató Tito Nieves, quien se toma muy personal todo lo que se dice públicamente sobre el “Rey de la puntualidad”.
“Héctor fue mi padrino, una influencia muy grande. Por eso me molestan las cosas negativas que sacan de él, porque pocos lo conocieron como ser humano. Por ejemplo, la película ‘El cantante’ creo que no tuvo mucho éxito porque los productores se enfocaron demasiado en el aspecto de las drogas. Pero esa vida oscura no puede opacar su éxito musical. Héctor no estaba arrebata’o las 24 horas y el público se enamoró de él como artista”, opinó Tito, quien también admiraba “la sencillez” de Lavoe.
En el 1979, Tito se integró al Conjunto Clásico, grupo con el que se mantuvo hasta 1986 y con el que produjo éxitos como ‘El piragüero’ y ‘El solitario’. Pero un año más tarde tocó fondo y se vio obligado a hacer una pausa en su carrera.
“Estaba en un momento bien difícil con la adicción al alcohol y las drogas. Tuve varias recaídas, como muchos de mis colegas, pero creo que eso era parte de mi destino. Yo me crié en una buena familia y fui monaguillo, así que nunca supe lo que era el vicio hasta que entré a la música. Veía a otros colegas y comencé a hacerlo como un vacilón, hasta que me hice adicto”, confesó.
“Ya llevo 19 años sin usar drogas”, añadió. “Me sometí a un tratamiento experimental y gracias a Dios conté con la ayuda de mi familia, porque sin eso uno no tiene nada”.
En el 1988 inició su carrera como solista apoyado por Ralph Mercado y su sello RMM.
“Mi primer éxito en esa etapa fue ‘Sonámbulo’ y de ahí seguí hasta el sol de hoy”, recordó el artista, quien se destacó por sus influencias de la música anglosajona.
“Como me crié en Nueva York crecí escuchando la música de Los Beatles, los Jackson’s Five, Donny Osmond y Frank Sinatra. Pero lo latino siempre se mantenía, porque la ciudad tenía la marca boricua”, explicó.
En efecto, uno de los mayores aciertos en la historia de Tito Nieves fue cantar salsa con letras en inglés. De su repertorio, el tema ‘I Like It Like That’ lo colocó en un nivel internacional.
“Cuando le llevé a Ralph Mercado la idea de hacer salsa en inglés no le gustó. Me dijo que eso había pasado de moda, pero me dejó grabar una, ‘I‘ll Always Love You’. El éxito fue tanto, que para el próximo disco me pidió que grabara dos y de ahí en adelante siempre incluíamos uno o dos temas en inglés en los discos”, explicó.
En años recientes, Tito señala su colaboración con el cantautor mexicano Marco Antonio Solís como otro de los momentos trascendentales en su trayectoria, en la que ha llevado su música a lugares tan distantes como África, Turquía y Japón.
Tito considera que en 35 años ha hecho una aportación importante al género, pero le emociona aún más saber que, tras sobrevivir duras pruebas de vida como perder un hijo y sobrevivir al cáncer, le queda mucho más por ofrecer. Con esa emoción cantará por primera vez en la Sala de Festivales del Centro de Bellas Artes Luis A. Ferré el próximo sábado, 24 de octubre, en dos funciones a las 8:00 y 11:00 p.m.
“Ese es un deseo que por fin se me va a dar y por eso estamos preparando un espectáculo diferente. Vamos a tratar de abarcar la mayor cantidad de temas posibles y hasta me van a ver bailando como nunca antes. Pero no voy a contar las sorpresas, porque los quiero impactar”, concluyó el artista, que espera lanzar un nuevo disco el año entrante.
Comments (0)
Publicar un comentario